El eterno retorno a lo cotidiano

A pesar de que el título de este blog sea chutado, debo aclarar que regreso a ser yo, nuevamente las circunstancias, miedos, orgullos y no negociaciones; me regresan a lo cotidiano, a ese malestar incesante de estar en incertidumbre.

Muchas veces uno creé que las situaciones de la vida las escoge uno, pero eso no es real, yo he tratado, de un tiempo a la fecha, hacer que las cosas cambien, que mis decisiones sean más maduras, pero a las hacerlas concientes, tangibles se vuelven a lo mejor egoístas.

Mi malestar, ya sea en la cultura o en todo lo que me rodea, es que te enseñen a ser tu mismo, que la honestidad y saber lo que uno quiere es la dirección correcta, pero nadie me enseñó que esta dirección, este proceso humano de crecer se volviera tan cerrado a tantas cosas, dejar el libre albedrío por alcanzar deseos, es una contradicción inminente en el crecimiento personal.

Si bien era feliz cuando no sabia qué quería, ahora que la dirección está perfilada, es más difícil ser yo, duele crecer y duele estar en incertidumbre.

Puedo controlar o trabajar satisfacciones que me den felicidad en cierta manera, como fisiológicas o personales, pero no puedo hacer nada en la satisfacción que me da la felicidad más llenadera... mi corazón, el amor.

Ahora estoy más triste, pues una decisión propia a no lastimarme hace que ese breve y eterno espacio de satisfacción no llegue a lograse.

Viene, viene, viene la lluvia, vienen los vientos.... Cientos.
Robi Draco Rosa 2007